
Mondot, un pueblo rescatado del olvido
No fue así porque, en los años 90, algunos vecinos de unas pocas casas nos propusimos rescatar la aldea de un abandono total. La construcción de una pista de unión entre Olsón, Mondot y Arcusa ejerció de trampolín para un nuevo comienzo. Con el tiempo se acondicionaron y se rehabilitaron algunas de las casas; se trabajó para que algo básico como el agua potable y los saneamientos se convirtiesen en una realidad; se limpiaron caminos; se ensancharon las pistas de acceso…
En 2003, a la pista que llega a Mondot recibió un riego de asfalto y se facilitó todavía más la comunicación. Mondot recobró el pulso, aunque solo fuera con algunas casas de segunda residencia.
Con el paso de los años se fueron quemando etapas para lavar la cara a un pueblo casi fantasma situado en una zona que se mantiene prácticamente virgen. Algunas de las casas recobraron la vida durante los fines de semana y el verano. Las fiestas en honor a su patrón, San Antón, el domingo más cercano al 17 de enero, se celebraban con la tradicional hoguera. Y en verano, el domingo más próximo al 20 de agosto (San Joaquín), la misa y la comida con baile llegó a juntar a más de un centenar de personas entre vecinos, familiares y amigos.
Mondot pertenece al Ayuntamiento de Aínsa-Sobrarbe, aunque en tiempos pretéritos formó municipio con Olsón y Javierre de Olsón. La iglesia de San Joaquín (siglo XVIII) y algunas casas solariegas como la Casa Villacampa (s. XVI) y su antiguo corral para resguardo de los animales, convertido ahora en nuestro alojamiento de turismo rural. También, aunque en estado de ruina, se puede observar la torre de defensa de Casa Velillas. En el barrio de la Iglesia, uno de los dos que configuran el pueblo, quedan los restos de un horno de pan en ruinas y a su lado se conserva una prensa para vino.
Desde El Corral de Villacampa os recomendamos conocer y disfrutar un lugar de plena calma, tranquilidad y en plena naturaleza.
Curiosidades:
– Hasta la década de los 50 no había acceso para los vehículos. Fueron los propios vecinos los que abrieron con su propio esfuerzo y sin maquinaria un pequeño camino. En 1976 se quedó sin habitantes.
– Antes de la despoblación sufrida a partir de la segunda mita del siglo XX llegaron a convivir hasta 100 personas de más de diez casas diferentes.
– La escuela se cerró en 1976. En este último periodo contó con solo dos niños.
– Se sitúa a 626 metros sobre el nivel del mar, rodeado de campos de olivos, almendros, alfalfa o trigo.
– En 1626, seis infanzones de Mondot asistieron a las Cortes del Reino de celebradas en Barbastro.
Visítanos y disfruta de nuestras casas rurales, El Corral de Villacampa y La Masadría, de Mondot, y de este entorno que lucha por sobrevivir en la España despoblada.